Queridos amigos de SIGNIS.

Los discípulos Pedro y Juan corriendo al sepulcro en la mañana de la resurrección del pintor francés Eugène Burnand ilustra la intensidad con la que estos dos hombres vivieron la aurora de esa primera Pascua.

Me maravilla la forma en que Burnand pudo usar sus talentos y dones para comunicar la urgencia, el miedo, la esperanza y el amor que experimentaron los discípulos mientras corrían hacia la tumba de Jesús.

La imagen también me cuestiona ¿cómo puedo yo, como comunicadora católica, expresar el misterio de la Resurrección sin reducirlo a lugares comunes, a expresiones vacías?

Nuestro patrono, San Oscar Romero y muchos otros, nos ofrecen un ejemplo simple y al mismo tiempo profundo. Son capaces de convertir, en el sentido más profundo del término, la luz de la esperanza divina y la fuerza del ser humano, en pequeños relatos que transforman vidas y comunidades.

Desde nuestra comunidad de SIGNIS, pido renovar nuestro compromiso de seguir comunicando el relato de la Resurrección.

También pido que durante estos días sagrados del Triduo Pascual, en el tiempo sagrado de la Pascua cuando volvemos a mirar el rostro de Cristo, podamos meditar y sentir la urgencia del llamado que claman los migrantes y refugiados, las comunidades y pueblos indígenas, los pobres y marginados, los jóvenes, los periodistas y comunicadores amenazados, las víctimas de cualquier tipo de violencia y cualquier persona cuyo corazón esté ardiendo de amor por el pueblo de Dios y por la creación.

Comuniquemos con ellos, junto a ellos, la alegría de un resurrección que puede ser su propia resurrección.

Helen Osman

Presidenta de SIGNIS