Descripción
En un sustrato crónico de desigualdad económica, América Latina se ha transformado en la última década en un escenario cambiante en lo que respecta a crisis de representación política, que ha generado, a su vez, un debilitamiento de las democracias. Esto se expresa en actos de corrupción de parte de los gobiernos, golpes de estado, sospechas de fraude electoral o incumplimiento de promesas electorales, incluso en ocasiones, revirtiendo a lo contrario lo prometido en campaña. Emergen líderes de perfil populista autoritario de derecha e izquierda y los poderes republicanos desdibujan sus fronteras de sus funciones y responsabilidades.