En medio del temor a que los contagios de coronavirus se desborden, millones de peruanos acudieron a las urnas para elegir al nuevo presidente de la nación y superar una aguda crisis política. Tras el cierre del proceso electoral, el candidato Pedro Castillo, de Perú Libre (izquierda), tiene asegurada su participación en la segunda vuelta electoral que se disputará en junio próximo, mientras que está por definirse el segundo finalista entre Keiko Fujimori, de Fuerza Popular (derecha) y Hernando de Soto, de Avanza País, también de derecha, Jonhy Lescano, de Acción Popular. Con menores oportunidades de llegar a la segunda vuelta aparecen Rafael López Aliaga (Renovación Popular) y la opción de izquierda progresista representada por Verónika Mendoza (Juntos Por el Perú).
Según el estudio a boca de urna de Ipsos para América Televisión, difundido a las 19 horas una vez cerradas las mesas de votación, Castillo llegó al 16,1%. Fujimori y De Soto aparecen empatados con 11,9%. Cerca, siguen Lescano, con 11% y López Aliaga con 10,5%. Más rezagada, viene Mendoza con el 8,8%. Cabe señalar que el margen de error es del 3%. Por eso no es posible descartar a ninguno de los nombrados hasta el momento.
La sorpresa de la jornada fue la votación alcanzada por Castillo. Las encuestas que no se podían publicar por la restricción legal pero que se difundían en redes sociales y medios extranjeros ya advertían del dramático ascenso que el profesor registraba en las preferencias.
Hay que añadir, también, que quien resulte electo en junio deberá lidiar con un Congreso bastante fragmentado. En efecto, las previsiones de Ipsos arrojan que podrían llegar al Pleno entre 10 a 12 bancadas.
Se trata de un serio desafío para la gobernabilidad. Si no se desea continuar con la crisis de este quinquenio que se va, la obligación del Ejecutivo y el Legislativo será alcanzar consensos mínimos.
Fuente: La República