Montevideo, Uruguay.- “Gracias, Tabaré”: es una de las frases más recurrentes en las redes sociales desde el domingo 6 de diciembre, tras el fallecimiento de Tabaré Ramón Vázquez Rosas, dos veces presidente de la República Oriental del Uruguay (2005-2010, 2015-2020), intendente de Montevideo, presidente del Frente Amplio, su partido político.
Según un comunicado emitido por su familia, murió a las 3 de la madrugada por causas naturales de su enfermedad oncológica. Debido a las restricciones sanitarias, sus hijos y nietos lo despidieron en una ceremonia reservada e íntima. Muchos militantes acompañaron el cortejo fúnebre que partió desde la Intendencia de Montevideo hacia el Cementerio de La Teja, otros siguieron desde sus hogares la transmisión por los medios y las redes sociales.
La jornada concluyó a las 21 horas con una convocatoria a la despedida desde las casas, escuchando el tema “Defender la alegría”, interpretado con Juan Manuel Serrat, cerrando con un gran aplauso.
Vázquez pasó por el patio de una obra salesiana en el barrio de La Teja, donde conoció a su esposa, María Auxiliadora Delgado, quien falleció en julio de 2019. De acuerdo con Alfonso Bauer, el padre inspector de los salesianos en Uruguay, Vázquez forjó un corazón oratoriano “aprendiendo a servir a los más humildes y a ser constructor del ‘honrado ciudadano’ que Don Bosco dijo”. Por su parte, el Movimiento Tacurú recordó que en 1992, cuando Vázquez era intendente de Montevideo, iniciaron los Proyectos Educativos de Acompañamiento Laboral. “Desde ese día, hasta hoy, miles de jóvenes vivieron esa experiencia y son testimonio de su compromiso por dar oportunidades y defender los derechos de los sectores más vulnerados. Estamos convencidos de que el bien que hace el ser humano se vuelve eterno y no debemos olvidar a quien inició ese bien… y tenemos la obligación salesiana de agradecerte”, escribieron en Twitter.
El padre Néstor Castell, director del Movimiento Tacurú, pronunció un emotivo discurso en el responso: “Es muy significativo que sea él quien reza, en nombre de muchos, en la despedida del presidente Vázquez”, dijo su hermano salesiano Francisco Lezama.
Vázquez, miembro de la Gran Logia de la Masonería del Uruguay, cuya esposa era católica, siempre demostró una amistad hacia la colectividad judía y un respeto por la pluralidad de ideas, la mejor síntesis del Uruguay, un país que lidera ranking de democracia plena en América Latina y se ubica en el puesto 15 en el mundo, según un estudio de The Economist con datos de 2019. En este sentido, cabe resaltar que personas de diferentes organismos y partidos políticos compartieron sus condolencias.
En 1990 recibió el Premio Jerusalem, otorgado por la Organización Sionista del Uruguay, quien expresó que su legado honrará su memoria para siempre. En agosto de 2008 viajó a Israel, precisamente el año en que el Estado judío celebraba sus 60 años. Lo recibió el entonces presidente Shimon Peres, saludó a las Fuerzas de Defensa, participó de una cena de Estado ofrecida por Peres a su huésped, en la que se encontró con Sebastián “El Loco” Abreu, jugador de la selección uruguaya de fútbol, visitó el Museo Recordatorio del Holocausto y desarrolló otras actividades de su agenda oficial.
Médico oncólogo de prestigio mundial, vetó la ley del aborto, no por razones religiosas sino por su convicción científica de la defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural. También “fue líder nacional e internacional en contra del tabaco”, estableció un comunicado de la Sociedad Uruguaya de Tabacología (SUT). Desde el organismo consideran que sus propuestas, su valiente enfrentamiento a la industria tabacalera, su apoyo a la sociedad civil en este tema significaron una base sólida para la implementación de políticas sanitarias de gran incidencia sobre la salud de la población y estas situaron a Uruguay como un líder en políticas de control de tabaco.
Otro mojón de su trayectoria fue el Plan Ceibal, creado en 2007 en un marco de inclusión e igualdad de oportunidades para apoyar con tecnología las políticas educativas uruguayas. Cada niño y adolescente del sistema público recibe en forma gratuita una computadora para su uso personal con conexión a Internet. A su vez, promovió la inclusión digital de las personas mayores, a través del Plan Ibirapitá. Los beneficiarios son jubilados que reciben en forma gratuita una tableta con una interfaz desarrollada para ser intuitiva y amigable, así como talleres de capacitación. Desde este proyecto le rindieron tributo, recordando su búsqueda de que “envejecer sea otra etapa de aprendizaje, de actividad e integración en la vida”.
El gobierno nacional decretó tres días de duelo. El presidente Luis Lacalle Pou señaló que tuvo instancias de diálogo personal y político con Vázquez que vivieron juntos: las valora y recordará. La Presidencia comunicó que el Uruguay pierde “a un destacado científico y defensor de los derechos humanos, promotor del diálogo como camino, a alguien que veló toda su vida por la salud de las personas”.
Redacción: Sebastián Sansón Ferrari, corresponsal de SIGNIS ALC en Uruguay