Ciudad de México/Washington/Ginebra.- Los Relatores Especiales de Libertad de Expresión de Naciones Unidas (ONU), David Kaye, y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Edison Lanza, recomendaron al Estado mexicano el establecimiento de políticas para la promoción de la diversidad y el pluralismo, abstenerse de criminalizar las frecuencias de radio y ampliar el acceso comunitario de la banda ancha para pueblos indígenas y zonas rurales. Así se desprende del documento de observaciones preliminares presentado por los funcionarios luego de su visita conjunta en México, que tuvo lugar entre el 27 de noviembre y el 4 de diciembre.
El objetivo principal de la visita fue evaluar la situación respecto de la seguridad de periodistas, el problema más grave para la libertad de expresión en el país. “México enfrenta una profunda crisis de seguridad que afecta gravemente los derechos humanos de su gente. Al origen de la crisis se encuentra una descompostura del estado de derecho y la gobernanza en niveles locales a lo largo del país, que simultáneamente lleva y es exacerbada por asesinatos, desapariciones y tortura….: los periodistas. La violencia, tiene un objetivo político en particular, es un ataque generalizado en las raíces de la vida democrática en México, a niveles local, estatal y nacional”, señala el documento. Además allí se plantea que “el crimen organizado ha generado maneras híbridas de interferir con el periodismo, generando división y desconfianza entre los periodistas y entre periodistas y funcionarios locales”.
En este contexto, los relatores instaron al gobierno “a incrementar rápida y sustancialmente los recursos disponibles para los mecanismos que han sido establecidos para proveer de protección y transparencia. México ya ha dado un paso loable creando estas instituciones; ahora debería darles las herramientas para ser efectivas”, expresaron durante la conferencia de prensa en la que se presentaron los resultado preliminares de su visita. En el documento se incluyen recomendaciones sobre protección a periodistas, rendición de cuentas sobre este tipo de amenazas y crímenes, asegurar la independencia de las investigaciones sobre vigilancia de periodistas, fortalecer mecanismos de acceso a la pública y recomendaciones sobre regulación de publicidad oficial para reducir su discrecionalidad.
En el informe preliminar también se establecieron recomendaciones sobre diversidad y pluralismo que brindan seguimiento a las recomendaciones realizadas en 2010 por los relatores anteriores, Frank La Rue (ONU) y Catalina Botero (CIDH).
Los relatores Kaye y Lanza manifestaron su preocupación sobre una legislación que se debate en el Congreso para modificar a la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión (artículo 304) y el Código Penal Federal (artículo 172 TER), que busca imponer penas de prisión a los medios comunitarios que operan sin autorización. “Si se adoptara esa legislación, le faltan garantías para asegurar que las radios comunitarias, que frecuentemente no solicitan concesiones por una gran variedad de razones, para asegurar que no sean blanco de estas disposiciones o que sufran una afectación”, indica el informe. Por eso los Relatores recomiendan “establecer políticas para promover la diversidad y el pluralismo en los medios y abstenerse de criminalizar las frecuencias radiofónicas puesto que sería una restricción innecesaria y desproporcionada para la libertad de expresión”.
A su vez, manifestaron su preocupación por las brechas de acceso, en particular de cobertura de las radios comunitarias y las dificultades de acceso a internet fiable en todo el país. Por eso, el documento insta al gobierno a “adoptar medidas para ampliar el acceso de los pueblos indígenas y las áreas rurales a la radiodifusión comunitaria, y continuar fortaleciendo el acceso al ancho de banda en áreas que carecen de accesos confiables”.
Otra de las preocupaciones señaladas por los funcionarios de ONU y CIDH fue el problema de la concentración en los medios. “México sigue siendo uno de los países con el mayor nivel de concentración de los medios, en la emisión, impresión y en línea”.
Fuente: OBSERVACOM