SIGNIS ALC, la Asociación Católica Latinoamericana y Caribeña de Comunicación, estará presente en la 1ª Asamblea Eclesial de América Latina y El Caribe, que se llevará a cabo en Ciudad de México, del 21 al 28 de noviembre. Este encuentro apunta a hacer memoria de lo acontecido en la V Conferencia General en Aparecida, y mirar contemplativamente la realidad con sus desafíos, en contexto de la pandemia.
Durante esta primera Asamblea se busca también reactualizar el compromiso pastoral de la Iglesia Latinoamericana “para que, en Jesucristo, nuestros pueblos tengan una vida plena en y por los nuevos caminos hacia el 2031+2033”.
En representación de SIGNIS ALC participará la comunicadora peruana Mónica Villanueva, ex presidenta de SIGNIS Perú y de SIGNIS ALC. Actualmente se desempeña como directora de comunicaciones y cultura en el Centro Cultural José Pío Aza, centro de investigación amazónica en Lima, Perú.
En sintonía con el espíritu de participación de sinodalidad de la Asamblea Eclesial, los comunicadores católicos de América Latina reflexionaron en el proceso de escucha sobre la realidad de la comunicación y se llevará el documento de aporte “Una Comunicación desde una Espiritualidad de la Escucha”. El aporte es el resultado del encuentro realizado por SIGNIS Perú, la Asociación Peruana de Comunicadores Monseñor Luciano Metzinger, junto a diversas instituciones y personas de iglesia, interesadas en el tema de la comunicación, en respuesta al llamado sinodal del CELAM y del Papa Francisco.
Comunicación desde una Espiritualidad de la Escucha
En el documento de aporte para la Asamblea Eclesial de América Latina y El Caribe se destaca que, desde la comunicación, es posible animar y promover una iglesia más comprometida con los “cambios urgentes tanto al interior de la comunidad de creyentes, como en la sociedad, en la salvaguarda y empoderamiento las personas vulnerables, el cuidado de la Casa Común, y en la construcción de una ciudadanía solidaria más fraterna y más humana”.
Hacia una espiritualidad de la escucha
En la reflexión realizada por los comunicadores católicos de Perú se enfatiza en que “Todo proceso de comunicación supone partir de la escucha. Sin ella no hay comunicación. La escucha, permite a la otra persona mostrar que existe, que tiene algo que decir, que puede manifestar su palabra con libertad. Solamente oyendo a la otra persona, podemos conocerla, comprenderla e iniciar un proceso de diálogo, de intercambio de valores, sueños y esperanzas. La escucha, contrariamente, a lo que se podría pensar, no es un signo pasivo, es más bien un signo transformador y liberador para enfrentar la injusticia social”.
Agrega que “Una espiritualidad de la escucha nos convoca a trabajar por una iglesia en salida, una iglesia samaritana, siempre en actitud permanente de conversión. Una iglesia que se acerca para escuchar con atención la voz del Espíritu que se expresa en el susurro o en el grito de cada realidad particular. Solamente escuchando podemos hacer nuestros los gozos y las esperanza, las tristezas y angustias de todos, pero especialmente de los más pobres (G et S, 1). De ahí la importancia de una actitud autocrítica, como Iglesia que se sabe servidora del Reino y, por lo tanto, obligada primero a ver, escuchar y dialogar, para servir mejor”.
Desafíos para la comunicación en nuestros países
En el documento de aporte se señala que urgidos por la difícil realidad de nuestros pueblos e “inspirados en los desafíos que nos plantea el Sínodo de la Amazonía y las propuestas que sobre el tema nos plantea el documento de Aparecida, creemos que debemos profundizar acciones orientadas a mejorar la comunicación en América Latina y El Caribe” y afirmar la comunicación como un derecho humano fundamental, “para democratizar la comunicación en nuestros países. Como ciudadanas y ciudadanos tenemos el derecho a decir nuestra palabra de manera individual y colectiva. No basta que los medios hegemónicos abran ventanas o espacios para la gente. Para avanzar hacia una verdadera democracia en la comunicación, es fundamental que los pueblos, comunidades y ciudadanía tengan acceso a medios comunitarios y medios públicos. Esto facilitará que la diversidad de voces, sean escuchadas, atendidas y tenidas en cuenta en la construcción de ciudadanías plurales, y permitirá que los mensajes que se difundan desde los medios no sean únicamente los que promueven los intereses de las empresas privadas o los públicos al servicio de gobierno de turno”, se destaca.
“Como cristianos, asumimos que la comunicación puede facilitar la comunión en las sociedades y culturas. Por ello, nos comprometemos a promover una comunicación solidaria: con la madre tierra, con los sectores más vulnerables, solidaria con los pobres, con los esfuerzos de cambio y de transformación de la realidad, hacia un mundo más armonioso y más fraterno”, agrega.
Educomunicación para promover pensamiento crítico
En otra parte del documento se insiste en la necesidad de promover procesos de formación en comunicación, orientados una “educomunicación que ayude a ejercitar el pensamiento crítico y creativo como expresión de una ciudadanía democrática imbuida de la práctica de valores, incluyente de la diversidad cultural, promotora del bien común y la justicia social”.
“Identificamos como públicos preferenciales de las acciones formativas que desde la Iglesia podemos impulsar a: la juventud, los agentes pastorales y los líderes sociales, especialmente de los pueblos indígenas, campesinos y sectores populares”, apunta el documento.
“Como comunicadoras y comunicadores, nos sumamos con entusiasmo a esta tarea de repensar de manera sinodal los caminos, compromisos, métodos y maneras de actuación de nuestra Iglesia en nuestras sociedades y culturas. Percibimos que el camino hacia una iglesia más sinodal, no se inicia con esta Asamblea Eclesial; pero es evidente que está teniendo un acento muy particular. En ese cauce responsable y dialogante es que nos expresamos con este documento”, concluye.
En el siguiente enlace se puede revisar el documento íntegro “Una Comunicación desde una Espiritualidad de la Escucha”
Redacción: SIGNIS ALC