Bruselas, Bélgica.- La Asociación Católica Mundial para la Comunicación, SIGNIS, condenó el secuestro y asesinato de los periodistas ecuatorianos Javier Ortega, Paúl Rivas y Efraín Segarra. En un comunicado que se hizo público en Bruselas, Bélgica, en donde se encuentra reunido el Consejo Directivo, la Presidenta mundial, Helen Osman y su Presidente latinoamericano Carlos Ferraro, expresaron su solidaridad con “las familias, colegas y amigos” de los comunicadores del Diario El Comercio, secuestrados el pasado 26 de marzo, y quienes cumplían su misión profesional de “investigar sobre la violencia, relacionada con el narcotráfico, que sacude la región”.
“Los acontecimientos recientes en Ecuador se suman a una creciente violencia contra la prensa que no puede ser permitida en ninguna parte del mundo”, dice parte del comunicado.
“Estos colegas estaban actuando, para citar al Papa Francisco, como “protectores de la información”, participando en un “periodismo por la verdad”. SIGNIS se compromete a redoblar su compromiso por un “periodismo de paz”, confiados en que “la verdad nos hará libres”, agregan.
En el comunicado, los directivos de los comunicadores católicos expresan su compromiso de seguir “trabajando de forma decidida en impulsar las mejores condiciones para el ejercicio de la libertad de prensa, a través de su red mundial de comunicadores, y a denunciar con la misma contundencia, los atentados y vejaciones que los periodistas sufran en el ejercicio de su crucial labor.”
Lea aquí la declaración íntegra de SIGNIS
El Consejo Directivo de SIGNIS, la Asociación Católica Mundial para la Comunicación, se une a nuestros miembros ecuatorianos para condenar el secuestro y asesinato de los periodistas Javier Ortega, Paúl Rivas y Efraín Segarra, por una escisión de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) cerca de la frontera entre Ecuador y Colombia.
Ofrecemos nuestra solidaridad a las familias, colegas y amigos de estos periodistas, cuyo único objetivo era investigar sobre la violencia, relacionada con el narcotráfico, que sacude la región.
Los acontecimientos recientes en Ecuador se suman a una creciente violencia contra la prensa que no puede ser permitida en ninguna parte del mundo.
SIGNIS, en una declaración conjunta de su Presidenta mundial, Helen Osman y su Presidente latinoamericano Carlos Ferraro, “seguirá trabajando de forma decidida en impulsar las mejores condiciones para el ejercicio de la libertad de prensa, a través de su red mundial de comunicadores, y a denunciar con la misma contundencia, los atentados y vejaciones que los periodistas sufran en el ejercicio de su crucial labor.”
Estos colegas estaban actuando, para citar al Papa Francisco, como “protectores de la información”, participando en un “periodismo por la verdad”. SIGNIS se compromete a redoblar su compromiso por un “periodismo de paz”, confiados en que “la verdad nos hará libres.”
Bruselas, Bélgica; 13 de abril de 2018.
Versión en Inglés
The Board of Directors of SIGNIS, the World Catholic Association for Communication, joins its Ecuadoran members in condemning in the strongest terms possible the kidnapping and murder of, journalists Javier Ortega, Paúl Rivas, and Efraín Segarra by a breakaway group of the Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) near the Ecuador-Colombia border. We offer our solidarity to the families, colleagues and friends of these journalists, whose objective was to investigate the truth about the scourge of drug trafficking-related violence afflicting the area.
These events in Ecuador are part of a growing wave of violence against the press that should not be tolerated anywhere in the world. “SIGNIS,” said in joint statement World President, Helen Osman and, Latin American President Carlos Ferraro “will continue to dedicate itself to work for the freedom of the press through its global network of communicators, and will denounce with equal force any similar harassment or attacks against journalists carrying out their crucial role.”
These colleagues were acting, to cite Pope Francis, as “protectors of news,” engaging in a “journalism that is truthful.” We pledge ourselves to redouble our commitment to a “journalism of peace,” knowing that “the truth will make you free.”
Brussels, Belgium, 13 April 2018