Buenos Aires.- La Décimo Sexta edición del Festival Internacional de Cine Nueva Mirada para la Infancia y la Juventud ha sido formalmente suspendida.
Así lo informó, la coordinadora del evento – la Asociación Civil Nueva Mirada- en un comunicado emitido el pasado 18 de septiembre, desde Buenos Aires.
Los organizadores responsabilizaron del hecho al Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), entidad que autoriza la realización de festivales cinematográficos en Argentina, al que acusaron de “falta de apoyo en tiempo y forma”
Consideran que algunos de los nuevos requisitos exigidos para la aprobación de los certámenes, como la emisión de cartas compromiso por parte de financistas y auspiciantes, han vuelto inviable su organización.
SIGNIS Argentina lamentó especialmente la cancelación del festival, tomando en cuenta que todos los años participó con su propio jurado en el evento. “Yo participé como Jurado en este espacio y puedo dar cuenta de la calidad del trabajo de Susana Velleggia y su equipo en la producción de este importante evento”, señaló Isabel Gatti. presidenta de la asociada de SIGNIS ALC.
Considerado uno de los de mayor renombre en Argentina y a nivel latinoamericano dentro de su categoría, Nueva Mirada estaba previsto realizarse entre el 14 y el 21 de septiembre de 2017.
Las ediciones pasadas se caracterizaron por exhibir una amplia programación de cortometrajes y largometrajes de ficción provenientes de diversos países, generalmente excluidos de los circuitos comerciales. Sobresalían los estrenos y animaciones.
Asimismo, fue usual la presentación de actividades paralelas con entrada libre y gratuita. El año anterior, 30 mil niños, niñas, jóvenes y docentes participaron en las mismas.
Susana Vellegia, directora del festival, destacó que uno de los principales objetivos del certamen es dar a conocer a los niños y jóvenes realidades alejadas de los valores unánimemente promovidos por las películas anglosajonas.
“Casi no se producen películas para niños en Argentina. Más del 90% del audiovisual para el público infantil proviene de un solo país, que cuenta con una profusa promoción y merchandising que exacerba el consumismo de los niños, niñas y adolescentes y forma su apreciación audiovisual conforme a un modelo único. Este público no goza del derecho a su propia identidad, cuya contracara es el derecho a la diversidad cultural, ambos consagrados por varias convenciones internacionales de derechos humanos”, señaló.
Pese a esta adversidad, los organizadores esperan reanudar el festival en el futuro, en “circunstancias más propicias”. Asimismo, en el comunicado, expresaron su agradecimiento a las personas e instituciones que siempre han brindado su colaboración.
“No hubiera sido posible sostener este exitoso festival durante 15 años sin el apoyo de los auspiciantes institucionales y embajadas de varios países, que de manera solidaria, comparten nuestros objetivos de promover la diversidad cultural, los derechos de los niños y la formación de públicos competentes, que son parte indisociable de la construcción de ciudadanía y estimulan la producción audiovisual nacional”, concluye el comunicado.