Una iglesia electrónica en días de coronavirus
En tiempos de la pandemia causada por el Coronavirus / COVID-19, que afecta a Brasil y países de todos los continentes, donde para combatir la circulación del virus es necesario restringir la circulación y aglomeración de personas, según la OMS (Organización Mundial de la Salud), un organismo de la ONU.Las autoridades brasileñas que siguen las recomendaciones de la OMS y los ejemplos de otros países que experimentan la pandemia, como China e Italia, prohíben por decreto, las operaciones comerciales y los servicios no esenciales en el sector público y privado para tratar de contener la pandemia con aislamiento social.Las iglesias de varias denominaciones han cerrado templos, pospusieron celebraciones festivas y actividades eclesiásticas, siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias.
Según el sitio web de Vatican News, en la Misa celebrada en la capilla de la Casa Santa Marta el domingo pasado (15/03), el Papa Francisco elogió la creatividad de los sacerdotes, quienes, en medio de la difícil situación en la que vivimos, siempre buscan nuevas formas de estar cerca de los fieles.
Sacerdotes, pastores, líderes religiosos y laicos anónimos de diferentes denominaciones usan sus dones que nacen de la creatividad singular, para promover la actividad cristiana en tiempos de renuncia y sufrimiento, con acciones alternativas para superar las limitaciones necesarias decretadas por las autoridades.
Existen innumerables ejemplos de creatividad con actividades cristianas en todo el mundo, en Italia, según el sitio web de Aleteia, el sacerdote católico Giuseppe Corbari, del pequeño Giussano, en Lombardía, colocó en las bancas de la iglesia, que estaba cerrada y vacía, las fotos de sus feligreses y celebró la misa que se transmitió por internet. El padre Reginaldo Manzotti también hizo lo mismo en Brasil.
Luteranos, anglicanos, bautistas, católicos y otras denominaciones, en varias regiones de Brasil, tienen servicios en línea, transmiten y comparten fe electrónicamente, además de información de prevención pastoral y de coronavirus.
En 2012, escribimos una reflexión que llamamos Una Iglesia Electrónica, hoy en tiempos de pandemia, compartimos con usted en comunión con los ejemplos mencionados anteriormente y los sugeridos en nuestra reflexión, una forma de cristianismo y de estar conectado con la iglesia, presente en las historias, compartida, tuiteada, más que la misma post pandemia.
Cada vez más personas están conectadas a las redes sociales en varias partes del mundo. Lo más destacado es Brasil, que, según una encuesta realizada por el Nielsen Company Institute, es el país con la mayor tasa de usuarios de Internet que utilizan algún tipo de red social.
Frente a seres humanos cada vez más conectados por los nuevos medios y tecnologías, decidí construir una reflexión pensando en las redes sociales y la evangelización, tan necesaria en el mundo en que vivimos.
A Jesucristo le gustaba compartir sus enseñanzas usando parábolas: “el reino de los cielos sigue siendo similar a una red que, arrojada al mar, recoge peces de todo tipo” (Mt 13, 47-50). Enseñanzas que estimulan nuestra imaginación.
Pienso en lo que pasaba por la mente de aquellos que escuchaban sabias enseñanzas: una “película” que ilustraba las parábolas, estimulando la imaginación de los discípulos y los curiosos. Los que escucharon las parábolas narradas por Cristo parecían ver, en el imaginario, videos de lo que se narraba, similar, por ejemplo, a cuando soñamos o vemos un video enviado por correo electrónico por un amigo.
Cristo, hace dos mil años, en su misión de difundir las buenas nuevas, eligió en su inmensa y ya populosa “red social”: doce discípulos, a quienes llamó apóstoles (Lc 6, 12-19).
Dijo Jesús: “donde quiera que vayas, anuncia que el Reino de los Cielos está cerca” (Mt 10-7). El Reino está cerca, porque está dentro de nosotros. Es nuestra responsabilidad conectar e implementar ese Reino.
Ante la misión dejada por Jesús, incluso ante las dificultades y persecuciones, los apóstoles comenzaron a evangelizar y difundir las enseñanzas del maestro, atrayendo nuevos seguidores al Reino de Dios, creando una inmensa red de nuevos evangelizados.
Juntos, (en comunión) y conectados, podemos ampliar aún más el anuncio de las buenas noticias. “Y este evangelio del Reino será predicado en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones”. (Mt 24-14).
Siguiendo el ejemplo de los discípulos, hoy podemos ahora, con un clic, pescar, agregar, buscar seres humanos para las “redes sociales” del Reino de Dios de justicia y paz. El siervo conectado de Dios Beato Juan Pablo II dijo: “la evolución es compatible con la fe cristiana”.
WhatsApp, Facebook, Instagram, YouTube, Twitter, blogs, sitios web y otros idiomas electrónicos, son herramientas importantes (atractivas) que, combinadas con los dones individuales de cada cristiano, pueden contribuir a estimular acciones virtuales en la construcción del Reino de los Cielos. ¡Es suficiente que la “cristoconectividade” te inspire! Videos, correos electrónicos, publicaciones, blogs, herramientas que pueden ayudar a transformar la vida de los usuarios de Internet.
Jesús de Nazaret tiene un número incalculable de seguidores, sus “publicaciones” son recordadas, leídas, seguidas, “gustadas”, incluso en los confines de la tierra, podríamos decir con seguridad, por analogía, que su Twitter tiene el mayor número de seguidores en el mundo .
Pero es necesario seguir, disfrutar, compartir estar conectado con el verdadero Jesús, en “oración” en plena comunión con una Iglesia misionera, evangelizadora, profética e, inevitablemente, electrónica. El signo de Dios en la tierra, la luz y la conexión para construir una sociedad más humana.
“El desarrollo es el nuevo nombre de la paz”. (Papa Juan Pablo II)
* Dado Galvão, documentalista y activista de derechos humanos, creador de la misión cultural y humanitaria de Ushuaia, Licenciado en Administración de Mercadeo – FTC, especialista en fotografía – UNIARA, estudiante de Teología Católica – UNINTER.
Fuente: SIGNIS Brasil, traducción libre de SIGNIS ALC
